El estereotipo es una imagen estructurada y aceptada por la mayoría de personas, como representativa de un colectivo La estructuración del estereotipo se da porque son imágenes formadas, y no en proceso de ello, pero no porque tengan argumentaciones lógicas o experienciales para su creación, puesto que son ideas pre concebidas desde el punto de vista que no se han llevado a la práctica por el individuo o el colectivo, y/o se han creado gracias a la subjetividad personal.
En la etapa inicial para su estructuración, las ideas pre-concebidas son creaciones personales que tienen como objetivo ocultar los vacíos conceptuales y experimentales que se tienen para explicar, interpretar determinado fenómeno social, o comunicar aquellas posiciones que están enmarcadas por las subjetividades -miedo, historia personal, odios..-.
Si esta idea consigue la atracción de un colectivo o la simpatía de alguien que tenga la capacidad para liderar masas, el estereotipo se convierte en algo identificatorio del grupo o algo con mucha fuerza como para influenciar su interacción.
De esta manera, la idea a priori de una persona se generaliza, teniendo el poder para actuar sobre el movimiento del grupo. Proceso de generalización en que pueden ocurrir diversas transformaciones de forma con respecto a la idea original, producto de visiones de los miembros del grupo, o puede conservarse en su forma primaria.
Modificar un poco el estereotipo significa la posibilidad que este se mueva en el mismo sentido, pero no que cambie de dirección. Cambiar de dirección en una idea pre concebida, anularía esa idea apriori, algo que significa darle creación a otro estereotipo.
El hecho que el estereotipo se alimente solo de las ideas pre-concebidas que están en el mismo camino, implica que el grupo que acepto este estereotipo, no permite la aparición del pensamiento crítico de sus miembros. Pensamiento crítico que cuestione la veracidad de la idea colectiva, la utilidad de esta o diversos tópicos que puedan deconstruir este concepto.
En caso que el estereotipo se pueda controvertir, la ligazón del grupo a través de una concepción se pierde, ocasionando que el grupo se disuelva. Desde este punto de vista el estereotipo es algo fundamental para que los colectivos que no tienen fines productivos, cobren vida.
Por esta razón, los estereotipos se vuelven un elemento de interacción social, los cuales aparecen en grupos formados sin objetivos socialmente beneficiosos, especialmente en los últimos años de la niñez y las etapas de la adolescencia y adultez joven.
Ante la no tenencia de esta clase de objetivos, el estereotipo se presenta como un motivo para identificarse y para tener compañerismo entre los miembros. Cada sujeto se reconoce como parte de un colectivo a través del estereotipo que hace la función de un ideal.
El estereotipo es una creencia que se convierte en ideal, la cual se traduce en comportamientos para reforzar esa idea o en conductas discriminatorias de las personas o conceptos que van contra esa idea, de tal manera que los estereotipos también pueden producir odio ante las personas que no estén de acuerdo con esa idea.
Los estereotipos se pueden observar en el desprecio hacia ciertos grupos debido a alguna característica innata de ellos –naciones, minorías étnicas-, peculiaridades de su desarrollo –gordos, flacos, altos, bajitos- o algunas particularidad de su personalidad –religión, concepción política-. Desprecio que produce la cohesión social de sus miembros.
Cohesión social en el cual los sujetos se agrupan para enfocar los conflictos y la agresividad interna hacia el exterior, y en donde no caben personas con pensamiento crítico que incentiven el cuestionamiento acerca de estos comportamientos y el posterior cambio de ellos.